La primavera ya ha llegado y en los medios de comunicación se aprovecha para recurrir a los típicos mitos sobre la estación con la intención de rellenar espacio informativo, pero ¿qué hay de cierto en la influencia de la primavera en las relaciones de los seres humanos?.

Para responder a esta pregunta es importante centrar el tema y fijar coneptos clave, por ejemplo, las hormonas que intervienen y la respuesta que producen.

Las feromonas son producidas por las glándulas apocrinas de la axila y los alrededores de los órganos genitales. Esta sustancia que afecta el comportamiento reproductivo de diferentes especies -entre ellas los seres humanos-, envían señales que son recibidas por el órgano vomeronasal (OVN), que se encuentra dentro de la nariz.


El OVN transmite estos mensajes a la parte del cerebro que gobierna las sensaciones humanas más básicas, como alegría,

cólera, amor, odio y despertar sexual.

Según estudios realizados se cree que las feromonas se encuentran principalmente en el sudor, por ejemplo; la androsterona es una feromona que produce el hombre y que estimula a la mujer. Durante la ovulación parece ser que le parece agradable y es tan potente que puede producir la desestabilización del ciclo menstrual. Mayoritáriamente se encuentra en el labio superior de los hombres.

La androsterona fue descubierta por Butenandten 1934, que también aisló la progesterona, recibiendo por ello el premio Nobel de química en 1939. En 1934 el químico suizo Leopold Stephan Ruzicka sintetizó la androsterona.

Hay estudios que afirman que el sudor de la pareja resulta agradable durante 12h y facilita la regulación de la regla. En un experimento, se les pidió a 8 mujeres que usaran la misma camiseta durante un día y luego se entregaron aleatóriamente a un grupo formado por ocho hombres,las camisetas sin decirles a quíen pertenecia, posteriormente se les dejó olor por separado a cada mujer y cada uno eligió correctamente a la dueña de la camiseta.

También parece ser que hay personas que no disponen de un gen que participaria en el proceso de interpretación de la función de la feromona, debido a que en diferentes estudios se ha llegado a la conclusión de que hay determinadas personas a las que ningun olor les parece agradable.

Se han intentado sintetizar perfumes con feromonas y en miles de páginas de Internet se asegura tanto éxito personal como laboral pero no hay ningún estudio que pueda fundamentar este hecho. Además, se cree que se deberia elaborar un perfume para cada persona.

Tal vez, la ciéncia nos diga algún día a que se debe la atracción pero por el momento tendremos que seguir probando mediante ensayo y error.