La distribución por titulación académica de los aspirantes
que superaron la primera prueba de una convocatoria de empleo público
sirve de partida a Joaquín Leguina para su artículo "Ujieres" que aparece en la sección
"La columna invitada" de la edición de El Economista fechada el 9 de noviembre del actual
y que se puede leer en este
enlace
De éste copio lo que sigue :

Como consecuencia del método de selección, entre los 30 finalmente aprobados abundan los ingenieros, los físicos, los matemáticos, los economistas, etc. En fin, niveles, al menos, de licenciatura.
Lo cual conduce a un sinfín de incómodas preguntas. Por ejemplo: ¿Qué sociedad es ésta, que lo mejor que tiene para ofrecer a un egresado universitario es un puesto de ujier? ¿Es la universidad una fábrica de parados y de subempleados? ¿Cómo puede sobrevivir una sociedad en la cual el 40 por ciento de los jóvenes que quiere trabajar no encuentra empleo?
Sobre esta cuestión ya he hablado en el foro en varias ocasiones,
véase, por ejemplo
"Ayuda para un Geógrafo que oposita a meteorólogo del estado"
en este enlace.

Cuando uno busca trabajo en este país descubre dos realidades - hay más - .
La realidad - al menos la que yo conozco - da aún más miedo
que acabar trabajando de ujier en instituciones tan respetables - supongo -
como son el Congreso de los Diputados o el Senado.

La primera es la de la economía sumergida, esto es...
esos trabajillos para los cuales no hay contrato de trabajo
- o ya te llegará cuando tengas experiencia - ,
o aquellos para los que vale un contrato mercantil.
Por lo que se refiere a los egresados que aspiran a ser doctores
o a los ya doctorados que investigan :
la variante de lo anterior son las becas que se suceden 'in saecula saeculorum'

La segunda es la del sub-empleo, a saber, licenciados y diplomados
que trabajan en puestos que se podrían realizar perféctamente
con la ESO y un cursillo,
véase, por ejemplo
"Y después de estudiar física...¿qué?"
en este enlace.

En Andalucía todo lo antes dicho empeora porque, con suerte,
puedes encontrar trabajo en hostelería - ya de la construcción olvídate - :
para la Semana Santa o la Feria de tu pueblo
o para servir un banquete en algún bodorrio o un catering.
Puede, también, que te llame un amigo para una mudanza o pintar una pared
Salvo esto, poco más hay.

Si por un casual apareciese en prensa una oferta de trabajo,
por ejemplo de vendedor en tienda de electrodomésticos,
a la entrevista - o prueba de selección - se presentan un centenar - con suerte - de aspirantes.
Todos famélicos y hambrientos.

Frente a esta realidad espantosa la única opción de supervivencia - estabilidad -
son las ofertas de empleo público.
La realidad es que sólo la 'burbuja inmobiliaria' alimentada por nuestro ingreso en la UME
y la globalización nos ha sacado - momentáneamente - del subdesarrollo
pero ¿ a qué precio ?

Lo que le quiero decir es que no es nada nuevo lo que Vd. cuenta, hombre...
que eso ya lo vivimos en el 'felipismo'.

En fin... ¡ cómo me gusta que se haga Vd. esas preguntas !
Le voy a hacer yo a Vd. otra :
¿ dónde estaba Vd. por entonces, don Joaquín ?

Un saludo y gracias a todos por leerme.