Hola a todos. Inicio este hilo para reflexionar acerca de los preconceptos que
condicionan el modo en que social y académicamente concebimos a la ciencia. En
este intento de apertura quisiera poner a consideración de todos algo que me
preocupó mientras participaba en el desarrollo de otro hilo. Es lo que sigue.
Algunas expresiones genéricas inducen en nosotros una sensación errada, mientras
otras no tienen ese problema. Cuando decimos "la historia" o "la democracia" nos
corre por dentro la sensación de estar nombrando entes supraexistentes, es decir
algo que existe por encima de los individuos involucrados en los hechos. Si eso
fuese cierto la historia y la democracia continuarían aunque la ciencia desarro-
llase un arma que dejase para siempre al planeta sin personas.
Adrede usé en el párrafo previo la expresión genérica "la ciencia", porque des-
pués de reconocer la trampa implícita en ese tipo de expresiones nuestra razón
emite una alarma cuando las utilizamos. La alarma se activa ante todas las ex-
presiones genéricas que aluden a las consecuencias sociales de acciones reali-
zadas por individuos. Los contenidos y las finalidades de la ciencia cambiarían
si las personas que la financian y las personas que la desarrollan fuesen otras
y contemplasen objetivos y prioridades diferentes.
La ciencia es lo que sus protagonistas deciden y no pertenece a un ámbito supra-
existente. Si J. Robert Oppenheimer afirma que nada impulsó tanto el avance de
la ciencia como el desarrollo y la detonación de armas atómicas y nucleares, po-
demos distraidamente suponer que una suprarrealidad denominada ciencia necesita-
ba eso inevitablemente para fines que trascienden la decisión y la voluntad hu-
manas. Pero no nos distraigamos. No perdamos de vista la participación del indi-
viduo en la ciencia y montemos vigilancia social ante todos los Oppenheimers que
intenten manipular nuestra conciencia con tales argumentos.
Los párrafos anteriores expresan solamente una opinión personal sin intención de
sentar doctrina. En todo caso la participación de todos ayudará a delinear un
modo conveniente de asumir los roles social y metodológico de la ciencia.
Un saludo.
condicionan el modo en que social y académicamente concebimos a la ciencia. En
este intento de apertura quisiera poner a consideración de todos algo que me
preocupó mientras participaba en el desarrollo de otro hilo. Es lo que sigue.
Algunas expresiones genéricas inducen en nosotros una sensación errada, mientras
otras no tienen ese problema. Cuando decimos "la historia" o "la democracia" nos
corre por dentro la sensación de estar nombrando entes supraexistentes, es decir
algo que existe por encima de los individuos involucrados en los hechos. Si eso
fuese cierto la historia y la democracia continuarían aunque la ciencia desarro-
llase un arma que dejase para siempre al planeta sin personas.
Adrede usé en el párrafo previo la expresión genérica "la ciencia", porque des-
pués de reconocer la trampa implícita en ese tipo de expresiones nuestra razón
emite una alarma cuando las utilizamos. La alarma se activa ante todas las ex-
presiones genéricas que aluden a las consecuencias sociales de acciones reali-
zadas por individuos. Los contenidos y las finalidades de la ciencia cambiarían
si las personas que la financian y las personas que la desarrollan fuesen otras
y contemplasen objetivos y prioridades diferentes.
La ciencia es lo que sus protagonistas deciden y no pertenece a un ámbito supra-
existente. Si J. Robert Oppenheimer afirma que nada impulsó tanto el avance de
la ciencia como el desarrollo y la detonación de armas atómicas y nucleares, po-
demos distraidamente suponer que una suprarrealidad denominada ciencia necesita-
ba eso inevitablemente para fines que trascienden la decisión y la voluntad hu-
manas. Pero no nos distraigamos. No perdamos de vista la participación del indi-
viduo en la ciencia y montemos vigilancia social ante todos los Oppenheimers que
intenten manipular nuestra conciencia con tales argumentos.
Los párrafos anteriores expresan solamente una opinión personal sin intención de
sentar doctrina. En todo caso la participación de todos ayudará a delinear un
modo conveniente de asumir los roles social y metodológico de la ciencia.
Un saludo.