Imaginemos que el tiempo es, como dicen las leyes físicas, simétrico. Si esto fuera así, partiendo de un evento que llamamos causa, tras un período de tiempo en cualquier dirección, hacia delante o hacia detrás, obtendríamos otro evento que llamamos consecuencia.
Para cualquier dirección y sentido del tiempo aumentaría la entropía y avanzaríamos hacia el futuro. Esto nos parece absurdo, porque hacia delante en el tiempo está el futuro con alta entropía, y hacia atrás el pasado con baja entropía. Pero esto es un prejuicio, por antiintuitivo que parezca pasado y futuro, antes y después, NO son coordenadas del tiempo.
El determinismo de las leyes físicas fija el orden de los eventos en la historia. La historia crece, acumulando evento tras evento, a través del tiempo de forma asimétrica, desde el pasado hacia el futuro, desde baja entropía hasta la alta, formando secuencias de eventos irreversibles. Para que haya historia tiene que haber tiempo. Entre un evento causa y un evento consecuencia fluye el tiempo, sin especificar dirección y sentido. Para cualquier dirección del tiempo la historia avanza, asimétrica.
No existe la flecha del tiempo sino la flecha de la historia. La historia, a golpe de causalidad y a través del tiempo, crece y no decrece, va del pasado hacia el futuro. Además las secuencias de eventos son irreversibles, el futuro estará más desordenado que el pasado.
En definitiva, la flecha del tiempo no existe, la flecha de la historia sí, y el tiempo es simétrico. Las leyes de la física y nuestras observaciones son totalmente compatibles.
Para cualquier dirección y sentido del tiempo aumentaría la entropía y avanzaríamos hacia el futuro. Esto nos parece absurdo, porque hacia delante en el tiempo está el futuro con alta entropía, y hacia atrás el pasado con baja entropía. Pero esto es un prejuicio, por antiintuitivo que parezca pasado y futuro, antes y después, NO son coordenadas del tiempo.
El determinismo de las leyes físicas fija el orden de los eventos en la historia. La historia crece, acumulando evento tras evento, a través del tiempo de forma asimétrica, desde el pasado hacia el futuro, desde baja entropía hasta la alta, formando secuencias de eventos irreversibles. Para que haya historia tiene que haber tiempo. Entre un evento causa y un evento consecuencia fluye el tiempo, sin especificar dirección y sentido. Para cualquier dirección del tiempo la historia avanza, asimétrica.
No existe la flecha del tiempo sino la flecha de la historia. La historia, a golpe de causalidad y a través del tiempo, crece y no decrece, va del pasado hacia el futuro. Además las secuencias de eventos son irreversibles, el futuro estará más desordenado que el pasado.
En definitiva, la flecha del tiempo no existe, la flecha de la historia sí, y el tiempo es simétrico. Las leyes de la física y nuestras observaciones son totalmente compatibles.
Comentario