El invierno nuclear

El invierno es una estación del año que comienza con el solsticio de invierno
y termina en el equinoccio de primavera. Es la época más fria del año
y se corresponde:
En el hemisferio septentrional con los meses de diciembre, enero y febrero.
En el hemisferio austral con los meses de junio, julio y agosto.

El invierno nuclear es una idea que nace de estudios sobre los efectos
en el clima de una guerra global con armas nucleares estratégicas
( como gracia os diré que se le califica como efecto indirecto ).
El bombardeo de los objetivos estratégicos, ciudades,
con este tipo de armas liberarían gran cantidad de humo y polvo a la estratosfera
( una capa de nuestra atmósfera que se extiende entre los 10 y 50 km. de la superficie )
Hay dos efectos a tener en cuenta:

1. El hollín impediría ( por su opacidad ) que la radiación solar alcanzase la superficie de La Tierra
( entre otros aspectos impediría los cultivos agrícolas ) y alteraría las lluvias

2. La radiación que deja La Tierra se debe a dos efectos principales
a. la reflexión de parte de la radiación recibida de El Sol
b. la radiación térmica emitida por la temperatura de La Tierra.
Este hollín es transparente al infrarrojo por lo cual perderíamos energía por calor.

en suma un enfriamiento similar al del invierno.

La forma original de esta idea se atribuye a Carl Sagan, Anne H. Ehrlich y Paul R. Ehrlich ( entomólogo )
y fue criticada como poco científica
tanto en lo referente a las estimaciones del descenso de temperatura ( unos 20 ºF )
como a duración. A esta crítica se le podría poner como título "el otoño nuclear".

Otro asunto más a tener en cuenta es la emisión de $CO_2$ que es un gas de efecto invernadero
y que impediría la salida de radiación térmica y por tanto impediría el enfriamiento.
Para entender un poco lo dificil que es esto porque hay efectos que apuntan en sentidos opuestos
puedes leer la entrada el oscurecimiento global

Hoy en día se sigue trabajando sobre el asunto incluyendo en los modelos
lo que se sabe sobre circulación atmosférica.
Desfortunadamente la incorporación de nuevas naciones al club nuclear
ha aumentado y complicado los escenarios posibles.
Estudios recientes indican que incluso un conflicto local a escala reducida
( unas 50 cabezas de guerra de 15 kton cada una )
produciría efectos graves sobre el clima.
De ahí la importancia de realizar una tarea de presión internacional
sobre estos "candidatos a potencias regionales nucleares".

Como he dicho antes, uno de los parámetros implicados es la cantidad de hollín lanzado,
que se mide para este tipo de problema en escalas de $10^12$ g
y así se tienen escenarios de 50-150 Tg.

Este hollín suspendido se calentaría por efecto de la radiación solar
afectando a la capa de ozono y favoreciendo su difusión a otras latitudes.

Referencias:
La entrada de wikipedia sobre invierno nuclear, en inglés.

"The Cold and the Dark: The World After Nuclear War"
Autores Paul R. Ehrlich, Carl Sagan, Donald Kennedy y Walter Orr Roberts
Publicado en 1984.

Una animación sobre la distribución del humo
debido a los efectos del calentamiento y arrastre por el viento
de Alan Robock, profesor del Dpto. de Ciencias Medioambientales adscrito a la Escuela de ciencias medioambientales
y biológicas de la Universidad de Rutgers.

"Nuclear winter revisited with a modern climate model and current nuclear arsenals: Still catastrophic consequences".
Autores: Alan Robock, Luke Oman y Georgiy L. Stenchikov
Artículo en inglés publicado en 2007 en Journal of Geophysical Research vol. 112.

"Massive global ozone loss predicted following regional nuclear conflict"
Autores Michael J. Mills, Owen B. Toon, Richard P. Turco, Douglas E. Kinnison, Rolando R. Garcia
Artículo en inglés publicado el 8 de Abril de 2008 en Proceedings of the National Academy of Sciences vol. 105; no.14;
páginas 5307-5312